En rueda de prensa del sábado primero de abril por la mañana y desde Nogales, el Secretario de Seguridad Pública, Adolfo García Morales, dijo: “Una foto dice mucho,” haciendo una clara alusión a una imagen que se viralizó por las redes sociales la tarde del viernes 31 de marzo. En esta aparecía retratado un oficial de la Policía Estatal de Seguridad Pública (PESP) disparando directamente a un hombre con unos niños que huían en el operativo de desalojo de la carretera Hermosillo- Bahía de Kino.
Desde la mañana de ese último viernes de marzo, la carretera numero 100, la que va a Bahía de Kino, fue cerrada por un grupo de manifestantes del poblado Miguel Alemán que demandaba el regreso unos autobuses que eran su principal medio de transporte a la capital y a los que el gobierno estatal les había retirado la concesión para darle preferencia a unos camiones que aunque tenían la misma ruta, no daban el mismo servicio por no tener los viajes suficientes, así como los horarios en la tarde y en la noche.
De acuerdo a la información que dio el Secretario de Seguridad Pública los intentos de negociación entre las autoridades y los manifestantes de la costa duraron siete horas, tiempo que les pareció suficiente para encontrar una solución. Desafortunadamente no llegaron a un punto de coincidencia y eso fue motivo suficiente para que tanto policías municipales como estatales despejaran la rúa con el aval de sus autoridades haciendo uso de armas no letales, como lo fue gas pimienta y balas de goma.
Una foto dice mucho…
Volvemos a repetir lo que dijo el Conito Morales, Secretario de Seguridad Pública: “una foto dice mucho”, porque es verdad, y en eso coincidieron los usuarios de las redes que viralizaron la imagen del policía apuntando con la supuesta pistola de balas de goma. “Una foto dice mucho”, tanto que el Secretario la interpreta de una manera, mientras que el resto de otra.
Para el secretario la foto dice, palabras textuales, que: “los policías no iban armados”. De esa forma explicaba que la única pistola de balas de goma era la que portaba el oficial que aparecía en las fotos y que el resto solamente llevaban escudos y toletes. Por otra parte los usuarios de las redes veían en esa terrible imagen la represión del estado y la clase de gobernantes que se tiene en la entidad, incapaces de dialogar, así como de resolver conflictos.
Buscando justificar el abuso de autoridad, el conito sostiene que se siguieron los protocolos internacionales para disolver conflictos, respetando los derechos humanos. Por este motivo es que para calmar la presión informa que el policía retratado en la imagen viralizada ha sido suspendido de sus funciones y que se la ha iniciado un procedimiento administrativo sancionador ante representantes de la Comisión de Honor y Justicia, “que es lo que establece nuestro reglamento y la ley respectiva a efecto de que se determine si hubo exceso de uso de fuerza en la actuación”, expresó el funcionario.
De acuerdo a la versión de los hechos del informe oficial, en la liberación de la carretera las fuerzas del orden no portaban armas de fuego, usaron únicamente escudos protectores, toletes, gases y una pistola de goma, siguiendo cuidadosamente los protocolos internacionales. Sin embargo, si revisamos la Pirámide Resistencia-Control, que se usa para ver qué nivel de control se debe usar por parte de las fuerzas públicas, de manera correspondiente al nivel de resistencia que manifiesta la ciudadanía, encontramos que el uso de armas no letales como lo puede ser una pistola de goma, es desproporcionado al nivel de resistencia que se manifestó en la costa de Hermosillo.
La Pirámide Resistencia – Control que se usa en los protocolos internacionales para disolver conflictos maneja siete niveles de control por parte de la autoridad que corresponden a los siete niveles de resistencia ciudadana que debe manifestarse para ser merecedor de una acción por parte de la policía. Los niveles de control van desde la presencia policial en el nivel más inferior, hasta el uso de armas letales cuando existe violencia mortal por parte de la ciudadanía. El uso de armas no letales, como son las pistolas de goma o las tanquetas, se usa cuando los manifestantes utilizan palos o bombas molotov, es decir que existen agresiones activas y el escenario es muy violento. En los videos del desalojo de la carretera que se ven a través de las redes sociales apenas se alcanza a ver resistencia pasiva y tal vez en algunos casos un poco de resistencia defensiva, lo que no amerita el uso de armas no letales o intermedia, la correcta reacción de las autoridades debió haber sido el uso de técnicas suaves de control físico o en algunos casos, con quienes se pusieran en actitud defensiva, el uso de técnicas duras de control físico, es decir encapsulamientos y sometimientos.
Por eso la foto que según el conito “dice mucho”, efectivamente dice mucho, es una muestra de que la policía estatal y el secretario de seguridad pública desconocen los protocolos internacionales para disolver conflictos que respetan derechos humanos o que conociéndolos no los aplican, del mismo modo la imagen confirma lo que ya se había visto en Nogales durante las manifestaciones del No Al Gasolinazo de esa entidad, y es que la política para el manejo de conflictos es la del rápido uso de las armas no letales.
Los motivos de las protestas
Quienes protestaban el viernes 31 de marzo en la carretera no eran únicamente los trabajadores inconformes a quienes les habían quitado la concesión como transportistas, sino también usuarios cotidianos entre los que había mujeres y familias completas, además de estudiantes universitarios del poblado que necesitan este servicio para ir a sus clases. Las 21 concesiones del Servicio Suburbano de Transporte pertenecientes al Poblado Miguel Alemán fueron retiradas por la dirección de transporte desde el 21 de marzo y según Eleuterio Rodriguez, uno de los concesionarios, esto se debe a que se quejaron por las malas condiciones de las calles en la comunidad costera.
Para conocer la importancia que tienen el servicio de transporte suburbano para los habitantes del poblado, es necesario tomar en cuenta algunas de las condiciones que tiene esta comunidad. Esta población rural de la costa de Hermosillo, que bien podría no depender de la capital de Sonora y ser el municipio numero 73 de la entidad, se dedica principalmente a la producción agrícola y es el hogar de los jornaleros agrícolas que trabajan para los productores de la costa. Aislado de Hermosillo, a mitad del camino entre la capital y su balneario, el poblado Miguel Alemán es ignorado por la soberbia hermosillense que no reconoce las necesidades de movilidad de esta comunidad que es parte de su municipio. Por este motivo es que para los habitantes del poblado es tan importante su sistema de transporte suburbano, es el que los mantiene conectado con la ciudad que es encargada de sus servicios, así como donde se puede acceder a una educación superior.
Aparte de el servicio de transporte suburbano del poblado, creado en la administración pasada, está la línea de camiones de la costa de Hermosillo, un sistema más viejo y que no está pensado en las necesidades particulares de los habitantes del poblado, sino que más bien conecta a Hermosillo con Bahía de Kino y pasa por el poblado. El dueño de los camiones de la costa de Hermosillo es el empresario Carlos Rodríguez Freaner, supuestamente cercano a la gobernadora Claudia Pavlovich Arellano. Por lo anterior es que se maneja que la gobernadora dio la orden de revocar las concesiones del transporte suburbano, para beneficiar así a los camiones de la costa, dándole el monopolio del servicio de transporte y pagando así compromisos hechos con el empresario Rodríguez Freaner.
El pleito entre el PRI y el PAN no justifica el abuso de autoridad
Entre los medios de comunicación y las voces de la opinión pública que son parte del aparato de poder del gobierno del estado, comenzaron a justificar que el supuesto enfrentamiento entre manifestantes y policías fue provocado por panistas que se beneficiaban con las concesiones al servicio de transporte suburbano. De esta manera es que el discurso oficial buscó deslegitimar una autentica protesta social por parte de los habitantes del poblado. El argumento de aquellos que quieren que la opinión pública vea al conflicto cómo un pleito entre el PRI y el PAN, evita que se reconozca la problemática de una sociedad que se encuentra aislada y necesita un gobierno capaz de resolverle la necesidad de estar mejor comunicados.
Por este motivo es que el domingo 3 de abril en el poblado Miguel Alemán sus habitantes marcharon para pedir respeto y dignidad, así como dar a conocer que a pesar de la violencia ejercida en su contra, no les han metido miedo. Los estudiantes universitarios, a quienes agredieron con más fuerza, manifestaron que no quieren ser un próximo Ayotzinapa, pero no por eso dejaran de demandar el transporte público que merecen y a hacer frente a una autoridad estatal que ha demostrado que no le importa desconocer los protocolos internacionales de derechos humanos. La imagen del policía disparando balas de goma a un señor con sus hijos en medio de la carretera Hermosillo-Bahía de Kino si dice mucho, habla de la represión del gobierno estatal y de una forma de manejar las protestas sociales que se repite una vez más, la de no dialogar y usar el gas y las bolas de goma para silenciar.